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Los clientes pueden acceder a la carta digital desde sus propios dispositivos, lo que les permite ver el menú en cualquier momento y lugar, incluso antes de llegar al restaurante. Esto es especialmente útil para revisar opciones y precios de antemano.
Las cartas digitales suelen ser interactivas, lo que permite incluir imágenes de los platos, descripciones detalladas, opciones de personalización y recomendaciones. Esto ayuda a los clientes a tomar decisiones informadas sobre sus pedidos.
La carta digital puede actualizarse fácilmente para reflejar cambios en el menú, precios o disponibilidad de platos. Esto asegura que los clientes siempre tengan información precisa y actualizada.
Al eliminar la necesidad de imprimir menús en papel, se reducen los costos asociados con la impresión y se contribuye al cuidado del medio ambiente al disminuir el desperdicio de papel.
Los restaurantes pueden gestionar y organizar la carta digital de manera centralizada, lo que facilita la introducción de cambios y actualizaciones en múltiples ubicaciones si es necesario.
Se puede incluir banners con funciones de marketing, como la promoción de platos especiales, ofertas del día.